Entre pequeños susurros que llenan mis labios y que mis oídos finos me hacen percibir la existencia de un ser cálido que habita en mi, me recuerdo lo vivo que estoy. Toda la vida he estado con este ente que soy, y que derrepente me encuentro extraño, desconocido. La sombra que el cuerpo proyecta que no es otra cosa sino un YO siguiendo fiel a este cuerpo al cual estoy asido por un vértice tan delgado. Desde abajo puedo darme cuenta de tus formas externas, de tus sensaciones plasmadas a flor de piel. Puedo ver las ligeras sonrisas que de vez en vez sueltas al aire. Veo a una persona que de la noche a la mañana toma camino hacia el rumbo desconocido. Hay ocasiones en que me gustaría ponerle un traspié a este tonto que lleva mi cuerpo como ausente, que no se conecta con mi mente. Quiero que se caiga, que ya en el piso se acerque a mi para poder gritarle un par de injurios por la indiferencia con la que me trata y una frase reconfortante que le ayude a levantarse con una nueva actitud. Que comulguemos los mismos sentimientos y no parezca que él va hacia un lado, y yo de manera irremediable tome camino hacia el lado contrario. Pendiendo sólo de ese pequeño punto que nos mantiene por alguna extraña razón juntos. Hay ocasiones en que me gustaría abrazarle con mi intangible deseo y prodigarle tanto amor que le haga refugiarse en mi, que encuentre en mi el espacio seguro al cual regresar. Porque desde acá abajo claro que me doy cuenta de que no te la pasas bien. Las máscaras con las que quieres pasar desapercibido son transaparentes desde mi posición, qué tristeza se ve por detras de ellas. Si pudieras experimentar qué delicia es tener todo el piso para ver el cielo y reconfortarme con el sol, disfrutar de los paseos con todo lo que eres y no solo dejarte guiar por tus distraídos pies. Sentir la humedad de los charcos, disfrutar de las irregularidades de la superficie, experimentar las distintas temperaturas... pero sobre todo llegar al encuentro futivo con todos los de mi especie.
Si mi querido amigo, entre sombras nos encontramos con el mundo y los sentimientos no están hechos para alejarnos. Por el contrario el amor nos une. Entre sombras y a la sombra de alguien más nos volvemos a disfrutar.
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1 comentario:
No desaparecemos, solo cambiamos de plano...
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