Imagen Marco Vinicio Garzon 

Hola, ¿cómo va ese corazón que tanto me preocupa?,
que se sume en la sombras de la tristeza y la confusión.
¿Por qué hoy que te veo, creo que se agazapa?,
como queriendo evitar otra cruel desilusión.

No dejes que el viento fuerte te haga tambalear,
no importa cuánto pueda soplar. ¡Ahí estaré contigo!.
Haciéndote firme con la energía del verdadero amigo.
¡Vamos giraluna hermoso no hay nada por qué temblar!

Vuelve a sonreir y a brillar, vuelve a cantar y a soñar.
La vida pasa rápido y no hay tiempo para vivir en el pasado.
Hoy tú tienes el control de lo que puedas encarar,
mañana te reirás del recuerdo de lo que te había perturbado.

Pues no debes olvidar que esto, es siempre pasajero,
no es el funesto mensaje de una ave de mal agüero,
es la sabiduría que la vida tiene mejores regalos,
para quien con confianza en sí, ha sabido conquistarlos.

¡Vamos, levántate, anda con firmeza y tesón!.
No cejes en el empeño, que la vida está ahí afuera.
No eres el único que sufre las heridas del corazón,
pero si eres la promesa que todo tu mundo espera.